febrero de 2024
¡Extender la huelga a Volkswagen para derrotar a la patronal!
¡Victoria a la huelga de
los trabajadores de Audi!
La huelga de más de 4 mil trabajadores de la automotriz Audi en San José Chiapa, Puebla, ha desatado una ola de declaraciones sindicales de solidaridad. Por bienvenidas que sean, lo que urge son acciones obreras. En primer lugar habría que extender la huelga a Volkswagen, también de Puebla y de la misma casa matriz que Audi, cuyo sindicato (SITIAVW) está afiliado a la misma central sindical (la UNT) que el de Audi.
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de FEBRERO – Ayer viernes se realizó un foro para organizar solidaridad activa con la valiente huelga que libran desde el 24 de enero pasado los trabajadores de la armadora automotriz Audi en San José Chiapa, Puebla. El foro fue coauspiciado por el Sindicato de la Unión de Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior (SUTIEMS) y el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM), e iniciado y organizado por el Grupo Internacionalista. El acto contó con la asistencia de una treintena de participantes con el propósito de organizar acciones bajo las consignas de “¡Victoria a la huelga de los trabajadores de Audi! ¡Por acciones obreras para derrotar a la patronal!”
En el foro participaron activistas de diversos sindicatos y grupos políticos: además de las organizaciones auspiciantes, el Sindicato Nacional de Trabajadores Administrativos y Docentes del CONALEP (SINADOCO), el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STMR), el Sindicato de Trabajadores de la Industria Nuclear (SUTIN), la Unión General de Trabajadores de México (UGTM), el Sindicato Independiente de Trabajadores del Colegio de Bachilleres (SINTCB), la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), el Sindicato Independiente de Trabajadores Académicos de la UNAM (SITAUNAM), el Colectivo de Trabajadores Zapatistas y la Brigada Emiliano Zapata, entre otras. El evento fue resultado de una visita a la huelga por parte de una brigada del GI a los pocos días de que estallara el paro.
El foro contó con la participación de representantes y activistas de una decena de sindicatos, sobre todo del sector educación.
La actividad comenzó con una intervención virtual de dirigentes de la huelga, dos jóvenes trabajadoras de la planta automotriz. Las compañeras expresaron el agradecimiento de los huelguistas por la realización del foro en solidaridad con su lucha y compartieron sus impresiones sobre el estado de la lucha. En el momento en que daban su testimonio, informaron, había más de 450 trabajadores en el piquete de huelga. Relataron que el SITAUDI enfrenta la cerrazón empecinada de la patronal. En San José Chiapa, las guardias nocturnas en la planta tienen que aguantar temperaturas de hasta 2 grados centígrados en medio de constantes ventiscas. Por otra parte, reconocen que la estrategia de los patrones consiste en intentar hacerlos rendirse por hambre lo que, dijeron, no van a lograr.
Un portavoz del Grupo Internacionalista recordó las batallas en contra del grillete corporativista, de control estatal sobre el movimiento obrero, en el sector automotriz que se libraron en los años 1970 y 80. Muchos aguerridos trabajadores de Spicer, una planta de autopartes del Edomex, fueron despedidos cuando el gobierno aplastó su huelga en 1975. Luego encontraron empleo en diversas plantas automotrices en el país, lo que hizo que se extendiera su espíritu de rebeldía. En sus primeros 15 años de vida, por ejemplo, el Sindicato de Trabajadores del Volkswagen, también en Puebla, libró catorce huelgas, muchas de ellas exitosas.1 La clave, insistió el vocero del GI, es que la lucha contra el corporativismo no puede reducirse a medidas organizativas. Se exige una lucha revolucionaria basada en la más completa independencia de clase de los trabajadores con respecto al estado capitalista, que no puede ser reformado, así como con respecto a los políticos de la patronal y sus partidos.
La Unión Nacional de Trabajadores (UNT), a la que pertenece el SITAUDI, es una central sindical neocorporativista cuyos burócratas son expertos en socavar luchas en aras de la pax laboral. En un mitin de la UNT del 31 de enero en el centro de la Ciudad de México no faltaron las vaporosas declaraciones de solidaridad con el sindicato de VW. Pero los trabajadores del sector deben comprender que en la huelga de Audi y su desenlace se juega su propio destino. Como enfatizó el portavoz del Grupo Internacionalista al rematar su intervención: “Lo que requiere la huelga de Audi para ganar y para noquear a los arrogantes imperialistas dueños de la armadora es extender la huelga a todo el sector automotriz, uno de los más dinámicos del capitalismo mexicano. Esto implica comenzar por la extensión de la huelga a la planta de Volkswagen en Puebla”, que pertenece al mismo consorcio capitalista alemán.
Entretanto, se acaba de informar que el principal dirigente del SITAUDI, César Orta, ha aceptado un vergonzoso acuerdo con la compañía que terminaría con la huelga a cambio de un infame 7 por ciento de aumento salarial. (La oferta original de la empresa fue de 6.5%.) Orta dijo que “firmó el documento como lo marca la ley” (El Economista, 3 de febrero). No obstante, su aceptación aún está sujeta a la aprobación por parte de los trabajadores. Orta se refiere a la Ley Federal del Trabajo, el entramado jurídico corporativista que sirve para encadenar las luchas de los trabajadores en este país. La LFT (que data de 1931) se inspiró en la legislación laboral del régimen fascista de Mussolini en Italia, y en algunos casos literalmente copió la Carta del Lavoro de éste. Jugar de acuerdo con estas reglas sólo puede garantizar la derrota de los trabajadores.
Aunque el gobierno populista burgués de Andrés Manuel López Obrador quiere hacerse pasar como “amigo de los trabajadores”, el resultado más notorio de su sexenio ha consistido en el reforzamiento de los mecanismos de control corporativista sobre el movimiento obrero, una camisa de fuerza que durante casi un siglo han encadenado al gigante dormido que es el proletariado mexicano. Forma parte del programa de AMLO el empeño de recorporativizar a los sindicatos “independientes” que escaparon de la regimentación estatal en que se asentó el régimen del PRI-gobierno. También juega un papel importante el fortalecimiento de las juntas de conciliación y arbitraje, instancias al servicio de la patronal en las que las reglas laborales están diseñadas para hacer descarrilar las luchas obreras. Tras su supuesta “neutralidad” ante el conflicto, las recientes afirmaciones de AMLO de que “falta poco” para que se resuelva la huelga, hay un ominoso llamado a los trabajadores para que “moderen” sus posiciones “extremas”.
En las diversas y entusiastas participaciones en el foro se recordó luchas del pasado, como hizo Agustín Flores, secretario de relaciones y solidaridad del SITUAM, quien relató episodios de la brigada de solidaridad obrera que ese sindicato envió en 2007 a Cananea, Sonora, para apoyar los asediados trabajadores en huelga en la mina.2 Se decidió recaudar despensas, así como conseguir apoyo monetario a los huelguistas del SITAUDI. También se acordó preparar una caravana de solidaridad para el sábado 10 de febrero que parta de la Ciudad de México hasta San José Chiapa en Puebla. Otros participantes hablaron de la necesidad de conseguir movilizaciones de solidaridad en otros estados, así como de la urgencia de preparar paros de diversos sindicatos en solidaridad con los valientes huelguistas de Audi.
Al cierre del foro, la sala desbordó en aplausos cuando las activistas sindicales reunieron a los trabajadores en el piquete de huelga y se despidieron del foro gritando “¡Audianos, unidos, jamás serán vencidos!” y “¡Victoria a la huelga del SITAUDI!” Los participantes en el foro devolvieron el gesto gritando al unísono “¡Arriba el trabajador, abajo el explotador!” y “¡Luchar, vencer, obreros al poder!” La huelga de Audi es capítulo más de la lucha de clases que sólo puede lograr una victoria definitiva con un gobierno obrero y campesino y la revolución socialista internacional. Esto exige forjar un partido leninista de la vanguardia proletaria. ¡Manos a la obra! ■
- 1. Véase “Mexican Auto Workers Play Hardball”, Workers Vanguard No. 435, 4 septiembre de 1987.
- 2. Véase “¡Poner a Grupo México de rodillas con una gran huelga minera nacional!” El Internacionalista, diciembre de 2007.